La Unión de Yonkeros dio a conocer una baja en las extorsiones en contra de sus agremiados, gracias a la coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, Secretaría de Seguridad Pública Estatal y Fiscalía de Distrito Zona Norte.
Héctor Lozoya, Presidente de este gremio, señaló que desde que se reforzó este trabajo en conjunto ya no han tenido casos de delincuentes pidiendo cuota, mucho menos han recibido llamadas de extorsión.
Mencionó que en el caso de las llamadas, se puso en marcha un operativo en el que desde que se recibe la llamada de inmediato son monitoreados los teléfonos, para ubicar a los delincuentes.
Sin embargo, ahora su mayor problema es la proliferación de yonkes clandestinos o deshuesaderos, principalmente en colonias de la periferia y el suroriente.
Lozoya indicó que en estos lugares es donde comúnmente desmantelan vehículos con reporte de robo, por lo que pide a las autoridades más operativos en estos negocios.
“Queremos ayudar en el combate al robo de vehículo y las autoridades deben de reforzar los operativos en todos los yonkes, hasta los que están en la Unión de Yonkeros”, dijo.
Agregó que los yonkes clandestinos son un verdadero problema, ya que al no tener documentación no se sabe de quién es y operan ilegalmente con la venta de autopartes robadas.
Puso como ejemplo el caso del cuerpo de la mujer que fue encontrada enterrada en un yonke de Anapra y que las autoridades nunca supieron de quién era dicho negocio.
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Mencionó que la Unión de Yonkeros cuenta con 300 afiliados y agradeció que a finales del 2023 el Alcalde, Cruz Pérez Cuellar, les hizo entrega de las primeras 25 licencias de funcionamiento.
Además él les prometió combatir los yonkes y deshuesaderos clandestinos que se instalan de la noche a la mañana en zonas habitacionales.
