Parral, Chih.- Luego de dos años de audiencias, los padres de la niña Celeste, quien pereció ahogada en 2018 tras ser succionada cuando nadaba en las albercas Santa Rita, el juez ordenó el pago de cerca de 1.3 millones de pesos como reparación del daño a los deudos de la menor.

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Fue el pasado 17 de julio de 2018 cuando la tragedia conmocionó a la región de Parral y sus alrededores, la familia de Celeste se encontraba disfrutando de una tarde dominical cuando por un desperfecto en una de las albercas del centro acuático la menor se quedó atrapada en un tubo lesionada de gravedad y pereciendo por asfixia por ahogamiento.

Ayer, tras una serie de audiencias, un juez ordenó el pago de indemnización como reparación del daño por la cantidad aproximada de 1 millón 300 mil pesos, mientras que el establecimiento seguirá sin abrir sus puertas.

Cabe recordar que los hechos en aquel momento se desencadenaron luego de una negligencia en los reglamentos que Protección Civil específica, al no contar con una rejilla de protección en la bomba de succión donde la niña quedara atorada, una tragedia que nubló aquel fatídico día.

El grupo de abogados que tomó el caso expuso las evidencias al juez, donde destacaron que luego de un año de ocurrida esta lamentable muerte, otra menor estuvo a punto de padecer la misma situación que la menor, ya que el balneario no acató las indicaciones propias del departamento de Protección Civil Estatal.

Ante la tragedia ocurrida el 18 de julio de 2018, en el centro acuático “Santa Rita”, ubicado en las inmediaciones de Valle de Allende, donde una niña de tres años falleció luego de ser succionada por un tubo de drenaje en una de las albercas, un juez ordenó el pago de aproximadamente $1’300,000 de pesos como reparación del daño para los deudos familiares.

Lo anterior, luego de que en la fecha señalada, sobre el acceso a Estación Morita, la menor no pudiera salir tras ser alcanzada por la succión de la referida tubería y perdiera la vida, según lo narraron en aquel momento sus familiares.

En aquel momento, la niña de sólo tres años se encontraba en compañía de sus padres en la alberca de mayor profundidad, cuando repentinamente fue atraída por la corriente del agua que era absorbida a través de la tubería en la que fue atrapada, mismos datos que fueron recordados ante la sentencia del juez.

Por lo tanto, los padres de la menor, identificada como Celeste O. C., habrán de recibir a la brevedad dicha cantidad otorgada por los propietarios de dicho lugar, el cual permanece cerrado no sólo por la pandemia, sino por decisión de los encargados.