Alrededor de 150 personas migrantes procedentes de Guatemala pidieron a gritos desde el bordo del Río Bravo del lado americano apoyo en comida, agua, cobijas y medicamentos ya que tienen cinco días pernoctando en el lugar en espera de ser detenidos por la Patrulla Fronteriza.
Diego Gaspar migrante guatemalteco quien vino acompañado de su pequeño hijo de nombre Jeremías comentó que tienen cinco días en el lugar y no piensan quitarse hasta que los reciba la autoridad de Estados Unidos.
Las personas gritaban desde el otro lado del Rio Bravo que no tienen comida, agua, cobijas y medicamento ya que hay menores enfermos.
Porfirio otro de los migrantes mencionó que hay cerca de 60 menores de edad que andan con ellos y empiezan a enfermar de calentura y problemas gastrointestinales.
Inclusive, ante la falta del vital líquido han tenido la necesidad de tomar agua del cauce del Río Bravo.
El miércoles pasado cerca de 30 personas -la mayoría mujeres y niños- fueron recibidos por las autoridades norteamericanas y llevarlos al Centro de Detención.
Los migrantes expusieron que los agentes de la Patrulla Fronteriza dijeron que van a tardar en cruzar a Estados Unidos porque el Centro de Detención está completamente lleno de personas migrantes.
Los centroamericanos aprovecharon el día soleado de ayer jueves para lavar su ropa y bañarse con el agua del Río Bravo.
Explicaron que el día que llovió, tuvieron dificultades para cubrirse del agua debido a que cuentan con pocas cobijas, lo que provocó que varios menores de edad se enfermaran.
Pidieron a las autoridades mexicanas como Cruz Roja y Derechos Humanos su apoyo para llevar alimentos, agua y todo lo necesario porque no quieren regresar al lado mexicano, ya que tienen la esperanza que la Patrulla Fronteriza los detenga y solicitar el asilo en Estados Unidos.
