Tras ocho días de permanecer en el puente internacional Paso del Norte, el migrante hondureño Gerson Valeriano Soto desistió ingresar a Estados Unidos para solicitar asilo político, por lo que tomó la decisión de quedarse en México y la mejor opción es trabajar en Puerto Vallarta.
Firme y decidido el migrante de Honduras declaró que para qué ir a un país donde no los quieren, donde hay racismo, discriminación y por lo contrario México les está dando la oportunidad de brindarles trabajo, salud, educación y la oportunidad de regresar a su país de origen y volver cuando sea necesario.
Acompañado de su esposa Jessi Yossira quien aseguró que ella continuará esperando en el cruce internacional para ser llamada por las autoridades del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés) para solicitar visa de trabajo en Estados Unidos.
Valeriano Soto pidió a las autoridades del Instituto Nacional de Migración el apoyo para continuar en territorio mexicano y ser trasladado a Puerto Vallarta en el estado de Jalisco una vez que su esposa logre cruzar a Estados Unidos.
El hondureño domina el idioma inglés en un 70% lo que permite conseguir un buen trabajo en México, por ello piensa ir a Puerto Vallarta donde acude mucho turismo estadounidense.
Gerson Valeriano está a unos cuantos pasos de cruzar los límites entre México y Estados Unidos por el puente internacional Paso del Norte que por ocho días viene soportando las inclemencias del clima, soportado las agresiones verbales de los transeúntes que pasan para ir a El Paso Texas, incluso ha sido objeto de agresión física por paseños alcoholizados.
Ahora cuando está a punto de ser llamado por las autoridades norteamericanas, el migrante hondureño se decide dar marcha atrás y quedarse en México; dejando a su esposa Jessi continuar el camino para que se supere en Estados Unidos.
“Con todo mi dolor de mi corazón no voy a cruzar a Estados Unidos y dejo a mi esposa la libertad de decidir si continua el plan de pedir asilo político porque no puedo obligarla que se quede ya que ella tiene ilusiones de estar en Estados Unidos”, dijo mientras Jessi estaba acostada cubierta con una cobija en la joroba del puente Paso del Norte.
Aseguró que permanecerá en el puente internacional Paso del Norte hasta que manden llamar a su esposa Jessi Yossira los oficiales del CBP en el lado americano.
