Debido a que no existe un proyecto donde se logre integrar de manera formal a los niños migrantes a las escuelas de nivel básico, autoridades estatales trabajan actualmente en crear un censo en los 17 albergues migrantes de la ciudad para determinar cuántos niños se encuentran en edad escolar.
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Dirving García, encargado del Programa de Atención a Migrantes, del Consejo Estatal de Población (Coespo) comentó que son 13 menores de los que actualmente acuden a una escuela en la colonia Tierra Nueva.
De estos 13 menores, siete van a la primaria, uno a la secundaria y los demás en preescolar.
“Estamos levantando un censo por parte de Coespo, no con el total de las personas en el albergue, sino con los niños, niñas y adolescentes, para poder dar razón a Secretaría de Educación Pública junto con Unicef y esta dependencia para promover estrategias de promoción educativa”, explicó García.
Dijo que la experiencia de menores migrantes que aquí habitan que acuden a la escuela es muy aislada, por lo cual, actualmente son los mismos encargados de los albergues los que promueven la inclusión educativa de varios menores.
“En la zona de Tierra Nueva dentro de un albergue desde el año pasado se ha estado al pendiente de ese tema. En cifras son 13 menores en ese espacio, 7 están en primaria, uno en secundaria, tres en proceso de entrar a ese nivel y el resto en preescolar”, aseguró.
Añadió que se desconoce si los menores migrantes que se tiene conocimiento de que acuden a una escuela pública van en calidad de oyentes o se les puede ya emitir una certificación de estudios.
“De que van a las escuelas van, pero no sabemos si van como oyentes o se les puede dar un documento de certificación de estudios o validación, lo desconozco, todavía no termina el ciclo escolar, si bien son esfuerzos que se están haciendo y como gobierno nos corresponde responder ante este reto”, agregó.
Dijo que hasta el momento sólo es un albergue que se ha involucrado en la cuestión educativa de los niños migrantes, sin embargo, en otros se llevan a cabo y se aplican programas educativos.
“En el Centro Integrador Leona Vicario y el Buen Pastor o Buen Samaritano hay proyectos coordinados por maestros, si hay esfuerzos importantes, incluso de fundaciones que hacen trabajos en los albergues, sin embargo, no están integrados al sistema escolarizado y ese es el reto, integrarlos”, mencionó.
Se espera que sea en las próximas semanas cuando se concluya con dicho censo para poder determinar qué acciones llevarán a cabo las autoridades de Coespo y Educación para integrar a los menores migrantes a los planteles educativos de la ciudad.
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