El diputado Omar Bazán presentó un punto de acuerdo para que el Congreso local pida al gobierno federal reponer los recursos económicos y extender los contratos del personal médico y técnico, para que siga funcionando en Chihuahua el Centro Regional de Desarrollo Infantil y Estimulación Temprana -CREDI-.
Lo anterior debido al anuncio del cierre del programa y el despido de varias decenas de trabajadores a quienes se les terminó su contrato laboral el pasado 31 de marzo, provocando que casi 20 mil niños dejen de recibir sus terapias.
El CREDI aplica pruebas de evaluación del desarrollo para la detección temprana de problemas de neurodesarrollo y evaluar niños con riesgos de retraso con un enfoque transdiciplinario, para establecer diagnósticos y diseñar planes personalizados de atención integral dentro del centro y a través de unidades móviles de desarrollo infantil.
Atiende, explicó el legislador, cinco áreas básicas del desarrollo del niño, como son motricidad gruesa, motricidad fina, área de lenguaje, áreas social cognitiva y adaptativa.
En la actualidad, el Centro Regional de Desarrollo Infantil y Estimulación Temprana (CREDI) Chihuahua, tiene en tratamiento activo a mil niños, además acuden a control del niño sano otros 1500 solo en la ciudad de Chihuahua, y se da seguimiento en la estrategia de desarrollo infantil a cerca de 20 mil niños en todo el Estado.
El año pasado el CREDI atendió a más de 10 mil niños en todo el Estado, en edades de uno a cinco años.
El CREDI Chihuahua se estableció en las instalaciones del antiguo Hospital Infantil y cuenta con psicólogos, nutriólogos, terapeutas de lenguaje, terapeutas de motricidad humana y pediatría.
Omar Bazán dijo que por todo lo anterior, es indispensable la coordinación de los gobiernos federal y estatal para que el CREDI siga en operaciones.