Ciudad Juárez, Chihuahua.- En una pequeña casa construida de madera y cartón, ubicada en la colonia Felipe Ángeles, vive Nancy García, quien tiene que colgar cobijas alrededor de la cama para poder proteger a su bebé recién nacido de las bajas temperaturas, las cuales en estos días han alcanzado hasta los -5 grados centígrados con una sensación térmica de -10.
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Ni como prender un calentón de leña o algo, no podemos porque nuestra casa es de madera puede ser muy peligroso expresó la madre de familia.
Comentó que la única forma en que pudieron resguardar a su hijo de las inclemencias del frío, fue cortando unos pedazos de cartón y colocarlos por fuera, encima del panel de yeso con el que había construido la casa su esposo.
Además, tuvieron que adecuar un “pabellón”, como es conocido en el estado de Chiapas, su tierra. Este consiste en colgar cobijas alrededor de la cama para impedir que entre el frío.
Allá lo colocamos para que no entren los mosquitos, pero pues aquí que sí hace frío me ha funcionado para evitar que el fresco entre directo platicó.
Por las noches, lo único que les queda es echar todas las cobijas posibles a la cama, para así, poder refugiarse un rato del frío que se siente dentro y que alcanza a entrar por cualquier agujero.
En la casa, la cual sólo consta de un cuarto, vive ella, su esposo y ahora su bebé, hace un año la construyeron desde abajo, sus planes son poder en un futuro construirla de block o algún otro material más resistente.
Platicó que durante esta pandemia, también se han visto afectados económicamente, pues ella tuvo que dejar de trabajar en la maquiladora y ahora, sólo logran subsistir con el sueldo que gana su esposo en un vivero de plantas.
Asimismo, platicó que la ropa tiene que lavarla a mano, lo cual se vuelve difícil cuando las temperaturas están bajas, como en estos días, pues siente como si se le quisieran congelar las manos, mencionó.
La zona conocida como la “Mesita”, donde está su casa, no cuenta aún con una red de abastecimiento de agua potable, por lo que tienen que llenar y cargar los botes de un tanque de agua que se encuentra a unos cuantos kilómetros.
Nancy, contó que hasta el momento no han recibido ningún apoyo del gobierno, pues del año que lleva viviendo ahí, nunca se ha visto a las autoridades ingresar al sector.
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