Ciudad Juárez, Chihuahua.- Desde importantes políticos y grandes empresarios juarenses, hasta comerciantes y personas de escasos recursos, son los que creen y adoran a la Santa Muerte, que es considerada como un "apóstol" para sus fieles y señal de "vida eterna".
En Ciudad Juárez, existen cinco templos dedicados a la adoración de "La Niña Blanca", que durante los últimos años, ha creado fama, al ser venerada por narcotraficantes, sicarios y puchadores, al ser considerada como un amuleto de "protección".
José Luis Rocha, uno de los encargados del santuario ubicado en la avenida Zaragoza #220, de la colonia Terrenos Nacionales, platicó en entrevista para periódico El Mexicano, donde reconoció que actualmente en esta frontera existen un total de cinco templos para su adoración.
Sin embargo, aclaró que la Santa Muerte no es mala, por el contrario, ella intercede por las personas ante Dios, además de que era adorada por nuestros antepasados y considerada como una deidad para las culturas indígenas.
En su santuario, diariamente, acuden entre 100 y 150 personas que van a pedirle un favor, rezarle o a agradecerle algún milagro concedido, pero dijo que nunca se le pide a las dinero o apoyo económico, ya que lo que se le da a la "Niña" debe de ser de corazón.
Sobre la creencia de que él no cumplirle una promesa puede costarte la vida, José Luis negó estos rumores, ya que ella no actúa por voluntad propia, si no por mandato divino.
A su vez, manifestó que la gente le tiene miedo por todas las cosas que se dicen en su contra sin conocerla, por lo que pide que no cierren su mente y le tengan fe, aún y cuando no ha sido reconocida por la iglesia Católica y ninguna otra religión.
"Si tú le tienes fe a la Santa Muerte, ella ejerce a través de Dios, ella es un apóstol más que ayuda a las personas, no es mala, al contrario, ella es la vida eterna", fueron las palabras con las que José Luis Rocha finalizó la entrevista, en la que mostró la otra cara de "La Flaca".
Cabe señalar que en el 2005, la Secretaría de Gobernación del Gobierno Federal, canceló el registro constitutivo al culto de la Santa Muerte, al argumentar que su adoración desvía gravemente los fines establecidos en los estatutos de la ley de Asociaciones Religiosas y culto Público, al ser considerado que su creencia está asociada con rituales y hechizos esotéricos.