Mientras el Decreto de Estímulos Fiscales para la Región Fronteriza Norte está “desinflado”, porque no está funcionando, por otro lado en Juárez hay una afectación económica grave, debido a los cierres parciales de los puentes, mismos que se dan como represalias del gobierno de Estados Unidos contra México, porque el gobierno de éste último país, no detiene el flujo migratorio de los centroamericanos hacia el norte.
Ambas situaciones se le atribuirían pues al gobierno federal de México, consideró el presidente local de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Eduardo Ramos Morán.
Señaló que no hay que darle muchas vueltas al asunto, porque simplemente en relación al Decreto para la frontera norte, no ha funcionado y está “desinflado”, situación de la cual los empresarios locales están conscientes.
Se refirió a que no hay un beneficio tangible para los residentes de Ciudad Juárez, en relación a la disminución del IVA, del 16% a 8%, ni de la disminución del Impuesto Sobre la Renta (ISR), que pasaría del 30% al 20%.
Otro punto del Decreto fue el aumentar al salario mínimo al doble, al pasar de 88.36 pesos a 176.72 pesos diarios.
En relación a los energéticos, se ofreció que en las ciudades fronterizas mexicanas costarían lo mismo que en las ciudades fronterizas estadounidenses vecinas de las mexicanas, lo cual no ha ocurrido.
En contraparte, el gobierno federal de México ha sido permisivo con la entrada al país de miles de migrantes indocumentados que vienen desde el sur y al saberse la situación en Estados Unidos, el presidente Donald Trump ha radicalizado su posición, al amenazar incluso con un cierre total de la frontera México-Estados Unidos, aunque los cierres parciales en los puentes internacionales ya están vigentes en Ciudad Juárez- El Paso, donde en los últimos días la industria maquiladora reporta pérdidas millonarias, al no poder cruzar justo a tiempo sus productos.
Ramos Morán, presidente de Coparmex, mencionó en entrevista que en términos generales, el esquema “ha ayudado muy poco, de manera muy lenta, digamos se ha estado desinflando el decreto”.
Señaló que buscan la forma en que se pueda activar más, porque la expectativa real es que funcione el decreto, pero “hasta ahorita no ha jalado”,
“Lo que queremos es que funcione pero no está funcionando… no hay que darle muchas vueltas, no está funcionando como debería de funcionar”, anotó.