Entran a México mil 500 chuecos a diario

El precio por "brincar" un vehículo a esta frontera va desde los 300 a los 500 dólares

Héctor Tovar | Periódico El Mexicano

  · miércoles 23 de octubre de 2019

Vendedores de autos usados estiman que en Juárez hay 39 mil 600 carros sin placas / Luis Torres

Ciudad Juárez, Chihuahua.- Diariamente, cerca de 1 mil 500 vehículos son internados de manera ilegal a través de la frontera entre México y Estados Unidos, de los cuales, 200 cruzan a Ciudad Juárez por alguno de los cinco puentes internacionales, según datos recabados a través de agencias importadoras y organizaciones pafas.

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Es así, como el problema de autos "chuecos" que persiste en la frontera requiere de una pronta solución, al ser el vecino país el principal proveedor de carros usados para las familias mexicanas, los cuales, en su mayoría, son adquiridos por medio de subastas.

Tan solo en la agencia Copart se subastan entre 5 mil y 8 mil autos diariamente, de lunes a viernes, y los costos de estos vehículos van desde los 350 dólares, como es el caso de un Nissan Versa vendido la mañana del martes por 375 dólares, a través del portal www.copart.com.

Manuel Rodríguez Camarillo, agente aduanal, informó que los precios en la regularización de automotores varía de acuerdo al año, marca y modelo, además de que solo se pueden importar aquellos que fueron armados en México, Estados Unidos y Canadá.

Estos precios, oscilan aproximadamente entre 18 mil pesos por un carro modelo 2000 hasta los casi 45 mil pesos por un modelo 2018, sin embargo, para la fraternización solo entran vehículos del 2014 hacia abajo y para la nacionalización del 2010 y 2011 en adelante.

Algunos de los requisitos son que se presente la compra de primera mano y el título a nombre del importador para la nacionalización, además de que tendrá que pagar el Impuesto al Valor, Impuesto General de Importación, el Impuesto Especial Sobre Automóviles Nuevos, el IEPS y el Impuesto al Valor Agregado.

Además, si el carro que se planea regularizar no fue armado en México, Canadá o Estados Unidos, el tramitador deberá de pagar adicionalmente el Derecho de Trámite Aduanero, lo que eleva aún más el costo.

César Raúl Villalba Navarrete, Coordinador Nacional de ONAPAFA, explicó que los vehículos que entran a registro son aquellos cuya serie empiezan con el número 3, que es de México; 1, 4 y 5 de Estados Unidos y 2 de Canadá; mientras que quedan fuera los que empiecen con la letra J de Japón, W de Alemania, K de Korea, el número 6 de Brasil y 9 de Australia.

El empresario dijo que al no haber regularización a bajo costo para vehículos de modelos antiguos, las personas deciden utilizarlos sin matrículas y al ser asegurados o decomisados por alguna autoridad, es imposible que logran recuperarlos por lo que deciden mejor comprar otro, fomentando que sigan introduciéndose ilegalmente más y más vehículos extranjeros.

"Cristian", quien por muchos años se ha dedicado a la venta de vehículos usados, nos explicó un poco la manera en que son introducidos a nuestra frontera, a través de los puentes Santa Teresa, Lerdo, Libre, Zaragoza y Tornillo, en contubernio con personal de la Aduana Fronteriza y personal del Servicio de Administración Tributaria.

Aunque hay personas que son residentes o de nacionalidad norteamericana, el cruce de autos lo controla un grupo de juarenses, contactados al momento en el que se pretenda internar un automotor a Ciudad Juárez.

El precio por "brinco" va desde los 300 dólares por un auto en funcionamiento, hasta los 500 dólares por uno que se necesite remolcar, para ser entregada la mitad del dinero a los contactos de la aduana que autorizan el cruce sin que le toque foco rojo.

Alberto Rivera, “El Vaquero”, líder de vendedores de autos usados, indicó que según el padrón con el que cuentan él y sus agremiados, en Juárez hay 39 mil 600 carros sin placas, de un parque vehicular aproximado a los 800 mil automotores.

Las marcas más comercializadas en los lotes son la Ford, Chevrolet, Dodge y Nissan, principalmente aquellos que se pueden importar, del año 2009 al año 2016, cuyo valor, ya importado, varia de los 4 mil a los 8 mil dólares, según las condiciones, la marca y el modelo.

Mientras que en los que son americanos, estos se pueden encontrar desde los 2 mil dólares y los que no se pueden importar, que son del año 2008 y anteriores, son ofertados en alrededor de los 1 mil dólares o menos.

En esta ciudad, existen más de 20 lotes o terrenos donde se comercializan estas unidades usadas, siendo los principales el de La Curva, Renacimiento, Chavira, Troncoso y Teto Car´s, mientras que los demás se encuentran en diversos sectores de la ciudad y fueron creados por pequeñas asociaciones de vendedores de autos.

Ahora, la comercialización ha evolucionado un tanto con las redes sociales, pero las ventas han bajado durante los últimos meses, según “El Vaquero”, lo que también se ha visto reflejado en las grandes agencias de autos.

Así mismo, aclaró que, aunque autoridades federales piden que se frene el ingreso de modelos antiguos, existen carros año 1995 que se encuentran en perfectas condiciones mecánicas y estéticas, inclusive por encima de algunos modelos 2008, pero esto depende del uso y la vida que se le dio en los Estados Unidos.

Jorge Nava López, Fiscal de Distrito, indicó en entrevista que son 40 mil los autos sin placas que circulan en la ciudad, mientras que el Diputado Federal de MORENA, Francisco Villarreal Passarett, calculó que son cerca de 20 mil.

Este mismo legislador aseguró en entrevista que la regularización es un hecho y que para enero del 2020 podría entrar en funcionamiento, sin embargo, no cuentan todavía con un plan de trabajo o proyecto sobre los reglamentos, requisitos y costos que tendrá.

Es decir, se espera que en un máximo de 60 días se presenten las bases del programa, el cual se busca sea aprobado por el Gobierno Federal y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, quienes solicitaron que no se permitiera el registro de modelos muy nuevos, mientras que la SEMARNAT pide que no sean muy viejos.

Lamentablemente, de entrar en vigor, este programa será temporal y no permanente, contando con un aproximado de cuatro meses para plaquear los cerca de 3 millones de autos ilegales que existen en todo el país.

A pesar de esto, existen otros estados donde el problema de la ilegalidad es aún más grave, como Coahuila, lugar en el que se estiman circulan aproximadamente 171 mil unidades extranjeras, es decir, existen cuatro veces más carros “chocolate” que en esta frontera.

Ante todo esto, el Fiscal General del Estado, Cesar Augusto Peniche, recalcó que los decomisos en el estado de Chihuahua y sus municipios seguirán, dado a que, por el momento, no existe ningún tipo de regularización que permita la libre circulación de vehículos sin placas.

El funcionario lamentó que “se siga desinformando a la ciudadanía”, al fomentar el comercio ilegal que, desde su punto de vista, enriquece a los vendedores y loteros irregulares, perjudicando a las familias chihuahuenses.

Sin embargo, organizaciones como Onapaffa y Anapromex, así como loteros, continúan expidiendo matriculas de cartón y engomados que aseguran, protege el patrimonio de los automovilistas para evitar el decomiso de su unidad.

En el caso de Anapromex, el tramite y entrega de documentos tiene un costo aproximado a los 3 mil 500 pesos, Onapaffa cobra por su placa de cartón y engomado, cerca de 800 pesos, mientras que los engomados rojos varían de los 350 a los 550 pesos, aunque estos dejaron de venderse a finales del 2018.

De hecho, días atrás, un dirigente de Anapromex fue detenido tras realizar una singular protesta al exterior de la Fiscalía de Distrito, en el Eje Vial Juan Gabriel, al prenderle fuego a un vehículo sin placas, en protesta por los decomisos.

Moisés V. R., de 29 años de edad, fue puesto a disposición de un Juez de Garantía el 8 de octubre y el 10 se celebró su primera audiencia, bajo los cargos de desobediencia y resistencia, ataque a vías de comunicación y daños al medio ambiente.

Sin embargo, la Juez Brisa Yadira Meraz, desecho los cargos y se ordenó que siguiera su proceso en libertad solo por el cargo de desobediencia y resistencia, a lo que tendrá que estar acudiendo semanalmente a firmar y tiene prohibido salir de la ciudad bajo cualquier circunstancia.