Trabajadores del condado de El Paso cambiaron los tacones por tenis con la finalidad de cuidar su salud.
El condado de El Paso no exige que sus empleados usen tacones, pero muchas mujeres optaron por usarlos a diario, hasta que la pandemia de COVID-19 envió a los trabajadores a casa en 2020.
“Antes de la pandemia, estábamos acostumbradas a usar tacones”, dijo la administradora principal del condado de El Paso, Betsy Keller.
“No usábamos tacones en casa durante la pandemia, por lo que la gente (no se acostumbró) a usarlos. Cuando llegó el momento de regresar (a la oficina), mis pies me gritaban”, Keller.
La administradora contó que la idea de cambiarse a zapatos tenis surgió después de almorzar con un compañero de trabajo que se había lesionado el tobillo en una caminata familiar.
La conversación pasó a los zapatos en general y las veces que no querían caminar a otros edificios del centro porque les dolían los pies y no traían un cambio de zapatos.
En ciudades como Nueva York, donde la gente camina con más frecuencia, Keller notó que las mujeres vestían trajes profesionales y calzado deportivo.
En una conferencia fuera de la ciudad, Keller vio a una asistente usar tenis de color rojo brillante con su atuendo de negocios.
La campaña tampoco se limita a las mujeres: los hombres también le han contado a Keller cómo están abandonando sus zapatos de vestir por calzado más cómodo.
Cambiarse de zapatos ya ha marcado una diferencia para algunos empleados del condado.
Ahora es más probable que las personas suban las escaleras para ir a almorzar, caminen para hablar con un compañero de trabajo en lugar de enviar un mensaje electrónicamente y caminen a reuniones en el centro en lugar de conducir, dijo Keller.
También realiza un seguimiento de su actividad física en un reloj de fitness y quiere comparar sus pasos de un año con los del último.