El zoológico de El Paso, se viste de luto con la gran pérdida de Savannah, elefante asiática, que durante años formó parte de la comunidad paseña.
Debido a un rápido, avanzado e irreversible declive de su calidad de vida las autoridades del zoológico y sus médicos tomaron la decisión humana de eutanizar al ejemplar.
El paquidermo tenía una edad de 71 años, sufría de artritis avanzada y ya no estaba respondiendo a sus terapias para prolongar bienestar.
Savannah llegó a Estados Unidos desde la India a los dos años de edad, residió en el zoológico de Dallas de 1954 a 1975; fue trasladada al zoológico de Baton Rouge en 1975. Finalmente llegó al zoológico de El Paso en 1997.
Savannah recibía una tratamiento especial que incluía terapia de células madre, múltiples medicamentos para el dolor, orales, suplementos e inyectables de articulaciones para ayudar a disminuir la inflamación, especialmente su área más afectada, el codo izquierdo.
"Ha sido una alegría ayudar a cuidar de Savannah durante 18 años. Ella participó activa y voluntariamente en su atención médica, siempre y cuando la recompensa fuera un regalo lo suficientemente sabroso", expresó Victoria Milne, médico veterinaria jefe del zoológico de El Paso.
"Todo el equipo veterinario extrañará nuestras visitas regulares y chequeos con ella, y mimos. Nunca es fácil decir adiós a nuestros residentes por mucho tiempo, pero nos quedamos sin opciones para mantenerla cómoda”, explicó la veterinaria y cuidadora de Savannah.
A lo largo de su enfermedad, continuó socializando con los guardianes de zoológico, disfrutando de largos remojos en su piscina y participando en actividades de enriquecimiento.
Su último cumpleaños fue en septiembre de 2023, se celebró con la comunidad cantando Happy Birthday, un enorme pastel de cumpleaños, e invitados firmando una enorme tarjeta de cumpleaños en su honor.
"Savannah era una gigante con un gran espíritu, fue gran embajadora para su especie y nuestro zoológico; el dedicado personal del zoológico y el equipo veterinario hicieron todo lo posible para asegurarse de que ella estaba cómoda mientras manejaban su cuidado al final de su vida; Lamentamos su pérdida y estamos agradecidos por los muchos recuerdos que nos dio en sus décadas en el zoológico”, Joe Montisano, director del zoológico de El Paso.