EL PASO, Texas.- Ismael “El Mayo” Zambada, presunto capo mexicano líder de una fracción del cártel de Sinaloa, fue presentado esta tarde ante un tribunal federal en esta ciudad fronteriza, en una audiencia que duró solo siete minutos.
Zamabada, fue llevado ante la juez federal, en una silla de ruedas, iba vestido con una pantalonera de color azul, un suéter azul con estampado de un balón de fútbol soccer y tenis tipo Croc de color naranja.
De acuerdo con representantes de los medios de comunicación reunidos en afuera de la corte, señalaron que a El Mayo se le vio tranquilo, consciente de lo que estaba sucediendo.
A su llegada a la corte fue custodiado por los agentes de US Marshall, quienes lo llevaron hasta el lugar donde se llevaría la audiencia, donde se le formularían los cargos por parte del juez federal, aunque hasta el momento no se han mencionado los cargos que se le acusa.
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Al inicio de la audiencia, El Mayo Zambada fue llamado hasta enfrente por la juez, quien le preguntó que si estaba conciencia de lo que estaba sucediendo y de que, si sabía que su abogado, Frank Pérez, también estaba representando a su hijo Vicente Zambada, y que sí quería que lo siguiera representando a él por lo que contestó que sí.
También se le fijó una tercera audiencia que será el 9 de septiembre y no se concretó si estaría él presente o si únicamente lo podrían hacer sus abogados.
Frank Pérez, abogado de El Mayo, a la salida de la corte, dijo que no podía decir nada, por el momento. “No hay comentarios”, dijo a pregunta de los reporteros.
Calles alrededores de la corte federal, en la avenida San Antonio Drive, fueron custodiadas por elementos de la Policía Estatal, en espera del arribo del presunto capo para su comparecencia.
Como es del dominio público, El Mayo Zambada fue detenido por elementos de la DEA, cuando arribó en un avión privado junto con el también líder del cártel de Sinaloa, Joaquín Guzmán López, hijo de El Chapo Guzmán.
El arresto se registró cuando ambos personajes, aterrizaron en un avión el pasado 25 de julio en el aeropuerto privado del condado de Doña Ana, que se encuentra a casi hora y media de El Paso, Texas y Ciudad Juárez.
Joaquín Guzmán López fue llevado de inmediato a una corte federal en Chicago, mientras que El Mayo Zamabada, se quedó internado en una prisión federal en El Paso, Texas, para su comparecencia ante autoridades federales, quienes determinarán si será trasladado a otra prisión ya sea del Estado de Nueva York o también de Chicago.