El departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) anunció otras acciones para aumentar la vigilancia en la frontera suroeste en esta semana, incluido el despliegue de personal militar adicional en la frontera debido al flujo excesivo que se dio esta semana de migrantes.
El DHS está desplegando otros 800 efectivos en servicio activo para ayudar con la logística y otras funciones en la frontera.
Ya había desplegado previamente 2 mil 500 miembros de la Guardia Nacional estatal en la frontera. En está ocasión no aclararon claro cuánto personal nuevo sería asignado al sector de El Paso.
El DHS también ha ampliado su capacidad de retención en 3 mil 250 para una capacidad total de casi 23 mil personas.
Esto se suma a las ampliaciones de varios miles en las instalaciones de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas que se implementaron antes de mayo.
Anunciaron que aumentarán los vuelos de expulsión internacional del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en más del doble desde la primera a la segunda mitad del año fiscal 2023, expulsando o devolviendo a más de 253 mil personas a 152 países desde que se levantó el Título 42.
Aumentará significativamente la expulsión acelerada de familias que no tienen una base legal para permanecer en los Estados Unidos en un plazo de 30 días.
El programa Family Expedited Removal Management, que se lanzó en mayo, ha procesado a más de mil 600 familias.
Se van a acelerar las solicitudes de autorización de empleo a partir del 1 de octubre para las personas en libertad condicional que programaron una cita a través de la aplicación CBP One dedicando personal adicional para reducir el tiempo de procesamiento de 90 a 30 días.