Organizaciones que defienden los derechos de los migrantes expresaron su sentir ante lo sucedido en San Antonio, Texas donde 50 migrantes fueron encontrados sin vida en la caja de un camión de carga, líderes sociales exigieron un cambio urgente en las políticas migratorias para evitar la perdida de más vidas.
“Las muertes de los más de 40 migrantes en San Antonio es una grave tragedia anunciada y provocada por las políticas de disuasión en la frontera de EE.UU.-Mexico, aplicadas tanto por el gobierno federal como por el del estado de Texas. El Título 42, MPP, el muro fronterizo y el Operativo Lone Star estatal del gobernador Abott, son claramente responsables de esta catastrófica crisis de derecho humanos”, declaró Fernando García, director de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos
“Esta tragedia es el resultado inevitable de las políticas migratorias en ambos lados de la frontera entre Estados Unidos y México que se enfocan en la disuasión en lugar de administrar la migración desde una perspectiva humanitaria y de sentido común. Habrá más muerte y desesperación si seguimos por este camino”, declaró Oscar Chacón, director ejecutivo de la organización Alianza Americas.
Finalmente, líderes sociales y religiosos cuestionaron las actuales políticas migratorias y como esa situación ha orillado a los migrantes a arriesgar su vida en busca de refugio en los Estados Unidos.
“Migrantes, refugiados y familias están usando vías más lejanas y peligrosas para cruzar debido a esas estrategias fronterizas. Seres humanos están muriendo en ríos, canales, desiertos, montañas, y ahora hasta en trailers y transportes de carga inseguros. Según el calculo conservador, están muriendo más de mil migrantes al año, eso es más de 3 personas al día. La tragedia en San Antonio rompe este mismo record. Es una situación insostenible y demandamos acción inmediata para prevenir más muertes innecesarias y para solucionar la política migratoria en la frontera”, agregó García.
“Al seguir insistiendo en una estrategia de disuasión migratoria, que incluye cerrar la posibilidad de buscar protección humanitaria en los EE. UU. a través de políticas como el Título 42, los gobiernos se han convertido en cómplices de tragedias como esta”, añadió Chacón.
“Una vez más, la falta de coraje para hacer frente a la reforma migratoria está matando y destruyendo vidas. No aprendemos. Dios nos enseñe a cambiar”, declaró el obispo de San Antonio, Gustavo García-Siller.
“Lloramos la pérdida innecesaria de vidas y exigimos políticas de inmigración más justas y valientes”, publicaron en la red social del refugio para migrantes en El Paso, Annunciation House.