El Paso, Texas.- Organización defensora de los derechos humanos de los migrantes, critica fuertemente que el presidente de los Estados Unidos (EUA) utilice bases militares para confinar a niños migrantes, considera que es un error fundamental del presidente que haya tomado esa decisión, manifestó Fernando García director y presidente de la Red de Derechos Humanos Fronterizos (BNHR).
El uso de las instalaciones militares es “tremendo” porque envía un mensaje cargado de simbología acerca de poder sobre calificar a los menores migrantes como niños delincuentes como si fuera una amenaza de seguridad nacional independientemente de la intención de resguardarlos de manera segura, afirmó el director de BNHR.
“El uso de bases militares para resguardar niños migrantes es ‘tremendo’, el mensaje y el símbolo que eso manda, niños en bases militares o sea que, son niños criminales que representa una amenaza en la seguridad nacional, aunque no sea la intención, eso es lo que se proyecta cuando en una base militar tienes a niños y representan algo malo y eso en términos de narrativa no es bueno, es exagerado y excesivo”, señaló Fernando García derecho humanista de BNRH.
Además, aseguró que al estar los niños migrantes en una base militar es sumamente complicado entrar para verificar su estadía, si en los centros de detención se complica entrar a observar las condiciones en las que se encuentran los migrantes, en una base militar es doblemente complicado y se presenta un problema de transparencia y rendición de cuentas.
Lo anterior con relación a la decisión del presidente de EUA Joe Biden, de utilizar bases militares para confinar niños migrantes, ya que el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EUA recibió la aprobación del Departamento de Defensa para comenzar a albergar a niños y adolescentes migrantes en bases militares en San Antonio y El Paso.
Por lo que el Departamento de Defensa aprobó albergar temporalmente a niños migrantes no acompañados en un dormitorio vacío en Joint Base San Antonio y en Fort Bliss en El Paso.
Por su parte la crisis migratoria que Fernando García denomina “crisis de infraestructura del gobierno federal” y que atraviesa EUA, generó que niños como los que fueron arrojados por el muro en días anteriores sucedieran por organizaciones de la delincuencia organizada como los “Polleros” y “Coyotes” que trafican con estos migrantes.
Hace unos días, unos traficantes de personas de los denominados “Coyotes” arrojaron a dos niñas de 3 y 5 años desde una parte del muro fronterizo en el poblado de Santa Teresa Nuevo Mexico en una zona desértica, los infantes fueron lanzadas al piso desde una altura de poco más de 4 metros.
Los delincuentes de Trata de Personas, después de arrojar y abandonar a las pequeñas, salieron en huida hacia adentro de México, las niñas fueron rescatadas por personal de la Patrulla Fronteriza (BP) y según información de la jefa de la BP en El Paso, las menores se encuentran bien de salud y ya fueron canalizadas a un centro de detención de la BP.
Gloria Chávez dijo que se encontró con las niñas un teléfono celular, los pasaportes de cada una de las menores y el número de teléfono de un familiar que vive en Estados Unidos y que se lleva a cabo una investigación junto con las autoridades mexicanas para identificar a los dos traficantes de personas que se ven en el video.
Para Fernando García de la BNHR, advirtió que, si verdaderamente el presidente Biden quiere arreglar el problema migratorio y que es eso un problema no una crisis, ya que el problema radica en la falta de recursos e infraestructura, debería de desarrollar un plan parecido a la Isla Ellis, de hecho, es su propuesta para resolver el problema migratorio por parte de la BNHR.
“Si Biden va en serio esto y quiere salir de esta dichosa crisis falsa, porque la única crisis que hay es la falta de recursos e infraestructura, pedimos que construya centros regionales a lo largo de la frontera y los estamos llamando la nueva ‘Isla Ellis’ que fue donde entraron millones de migrantes europeos por Nueva York hace más de 100 años y definió el concepto del país, como un país de migrantes”, anunció Fernando García.
Entre 1892 y 1954 aproximadamente 12 millones de pasajeros, que llegaron a los EUA a través del puerto de Nueva York, fueron inspeccionados allí, tanto legal como médicamente, se estima que tan sólo un mínimo porcentaje fue deportado (2 por ciento), este último grupo de deportación estaba integrado principalmente por polígamos, criminales, anarquistas y portadores de enfermedades infecciosas.
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