ROSALES.- Después de un mes y medio de gestiones por parte de un grupo de vecinos, esta semana comenzaron los trabajos de la Comisión Nacional del Agua para reparar el bordo de la ribera sur del río San Pedro, con la finalidad de prevenir que ocurran inundaciones por una eventual creciente.
José Luis Moreno, representante de los propietarios de las granjas ubicadas cerca del río, comentó que hace tres días llegó la maquinaria para reparar el bordo que estaba colapsado, esperándose que los trabajos terminen antes de que la corriente crezca por las lluvias.
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Sin embargo, señaló que únicamente está trabajando un tractor de oruga en el lecho del río, donde se necesitan más máquinas para completar un bordo cuya longitud es casi de medio kilómetro.
“Esperamos que lleguen más máquinas; anda un solo tractor de oruga, un D-6, y el compromiso son 350 metros de un bordo alto y necesitan más máquinas pues para cumplir con ese trabajo”, expuso Moreno.
Además, señaló que la CONAGUA tardará quince días en completar el bordo, según dijeron funcionarios de la propia dependencia a los granjeros, quienes desde hace un mes y medio han realizado gestiones para acelerar los trabajos, pues la temporada de lluvias está a las puertas.
Pese a todo, los granjeros respiran más tranquilos con el arranque de la obra, pues confían que el bordo estará terminado antes de que haya una avenida fuerte del río San Pedro, que en años lluviosos se convierte en un torrente violento.
En septiembre del año pasado, debido al derrame de la presa Francisco I. Madero, el río tuvo una avenida fuerte que ocasionó numerosos perjuicios a los propietarios de las granjas, las cuales se inundaron, perdiéndose mobiliario, herramientas e incluso parte de algunas construcciones.
Y este 2023, se tiene la expectativa de que las precipitaciones pluviales vuelvan a ser copiosas y que los ríos aumenten su caudal.