Conmoción y tristeza causó en la comunidad deliciense la muerte de Ana Antonieta Torres, fundadora de la asociación Fernandito Lazalde Quiero Jugar, que brinda atención a decenas de niños enfermos de cáncer en la región; este lunes le fue dado el último adiós en la ciudad que la vio nacer y morir.
Tras batallar durante más de un año precisamente contra el cáncer, este domingo 23 de abril se supo que “Nona” Torres falleció a los sesenta años de edad, sobreviviéndole dos hijos y tres hermanos.
Fue cerca del mediodía de este lunes que sus restos mortales arribaron a la ciudad, para ser velados en una conocida funeraria ubicada en el sector Oriente de la ciudad, donde familiares, amigos y padres de familia de la asociación Fernandito Lazalde se reunieron para darle el último adiós.
Posteriormente, a las 15:00 horas, el cuerpo de Ana Antonieta Torres fue trasladado a la iglesia del Santuario, para el servicio religioso en su honor. Más tarde, los restos fueron cremados y entregados a la familia.
La noticia del fallecimiento de “Nona” Torres causó conmoción entre los habitantes de la región, ya que junto con su esposo Fernando Lazalde Ochoa, quien falleció el 19 de junio de 2021, se dedicada a brindar apoyo a los niños enfermos de cáncer, por lo que se hizo conocida y apreciada en la comunidad.
Cabe recordar que el pasado martes 7 de febrero se rindió un homenaje a Ana Antonieta por parte del Club de Leones en el Centro Cultural, pero por motivos de salud no le fue posible asistir, siendo su hija quien recibió los reconocimientos.
Fue la pérdida de su hijo, Fernandito Lazalde, lo que motivó a Ana Antonieta y su esposo a constituir la asociación el 2 de julio de 2011, con la finalidad de mejorar la calidad de vida de los niños a través de talleres deportivos y culturales, así como terapias psicológicas gratuitas para sobrellevar el sufrimiento.
Posteriormente se emprendieron actividades para reunir recursos con los cuales adquirir medicamentos oncológicos, pues muchas de las familias no pueden pagarlos, además de brindar el servicio de nutrición con alimentos ricos en antioxidantes y 100 por ciento orgánicos, para ayudar acelerar la rehabilitación de los niños y niñas.
En 2016 inició otro proyecto, que fue la construcción de la clínica de nutrición oncológica en un terreno donado por el municipio, con el propósito de brindar alimentación especializada, apoyo psicológico y actividades recreativas. El proyecto sigue inconcluso a la fecha.