Una madre de familia, periodista cultural y ganadora de Columna de Plata, Consuelo Medrano Domínguez, socióloga y comunicadora, admitió haber sentido durante algún tiempo celos profesionales ante su esposo, también periodista, con quien lleva una excelente relación desde hace muchos años.
Bajo el seudónimo profesional de Consuelo Sáenz, egresada de Sociología, con maestría en Educación, decidió involucrarse en el Periodismo Cultural hace apenas dos años.
Tiene dos hijos, una joven de 15 y un varón de 12, casada con Luis Carlos Ortega, de quien dijo está complementada en todos los aspectos.
Su marido es actor de teatro, periodista, con una intensa trayectoria en medios informativos, lo conoció cuando ella tenía 26 años, le lleva él.
Las crisis matrimoniales existen, en el ámbito profesional existen muchos celos en los amigos, en la misma pareja, en lo personal yo lo sentí y bastante, insistió.
“Fui feminista radical y era muy violenta, las mujeres solemos refugiarnos en la casa, empero, les echamos la culpa al hombre, por no salir, por encerrarnos y envolvernos en nuestros problemas, dijo, claro que me daban muchos celos con mi esposo por sus actividades”, señaló.
He salido adelante a base de estudios, de esfuerzo, de investigación, actualmente me encuentro en el Acervo Cultural de la Enciclopedia de la Literatura Mexicana, presumió.
Ganó la Cultura de Plata por entrevista a Antonio Ramos Revilla; fue finalista del premio de periodismo José Vasconcelos, por otra entrevista, acciones que la llenan de orgullo.
Admitió que nunca tuvo pago alguno, sin el apoyo de mi esposo no lo habría logrado, mi marido me apoyó en todos los aspectos, admitió.
En cualquier trabajo que me presentaba me consideraban como sobre calificada, no tengo contactos que me apoyen plenamente, agregó.
En cuanto a la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, cuestionó, ¿para qué mujer?, ¿a quien cree en el amor romántico?, ¿a quien tiene vagina pero que le gustan las mujeres?.
Calificó esta fecha como algo que ni siquiera se debe celebrar, luego que el principal obstáculo que ha encontrado en su trayectoria, no han sido los hombres, las mismas mujeres le han bloqueado en su afán de buscar y lograr un trabajo adecuado a su carrera y gustos.