A pesar del auge de las nuevos cultos que se han creado en los últimos años, los chihuahuenses se mantienen, en su mayoría, fieles al catolicismo, pues según datos del Censo General de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 2 millones 601 mil 366 chihuahuenses practican dicha religión.

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Seguida de la católica, las religiones protestantes, cristinas y evangélicas cuentan con un total de 323 mil 236 creyentes, en las que se encuentran la iglesia del Dios Vivo, Columna y Apoyo de la Verdad y La Luz del Mundo; mismas que se establecieron en la región por la actividad minera del siglo XIX. La segunda iglesia protestante que llegó a Chihuahua, fue la Iglesia Metodista, conformándose en 1885 con los misioneros de la Iglesia Metodista del Sur, Samuel Kilgore y Alejandro Sutherland, provenientes de Inglaterra.

Las religiones que conforman una bíblica diferente a la evangélica, como lo son los Adventistas del Séptimo Día, los Mormones y Testigos de Jehová, contemplan 69 mil 796 de la población del estado, conformándose en el estado en el último cuarto del siglo XIX.

En cuarto lugar se encuentran las protestantes históricas o reformadas, con un total de 15 mil 830 afiliados, mismos que conforman las Anabautistas o menonitas, la Iglesia del Nazareno, la Metodista, Presbiteriana, entre otras.

Así mismo, el INEGI, detalla que existen 251 chihuahuenses que profesan la judaica, seguida de la islámica con 78, resaltando que en el estado hay 253 mil 972 personas que no profesan religión alguna.

El estudio de las religiones ha sido un tema de interés público, por lo que el antropólogo social, especialista en temas de religión, Enrique Romero Martínez, comparte con El Heraldo de Chihuahua un enfoque antropológico y sociológico de las religiones estatales.

¿Por qué algunas religiones tratan de imponerse?

“La religiones, si las abordamos históricamente, la mayoría de ellas, no todas, han tendido a ser etnocéntricas, han sentido tener una verdad y que este grupo que tiene esta verdad es superior a estos grupos y que esto justifica hacer a los demás como yo soy. Esa es una característica común de los movimientos religiosos, se busca imponer una verdad. Al igual que pasa con las ideologías políticas, que son muy parecidas a los sistemas religiosos, porque parte de una superioridad ideológica y moral.”, afirma Romero.

¿Los cultos indígenas, se respetan?

En Chihuahua, se cuenta con varios grupos indígenas que practican diferentes versiones de la religión católica, pero como explica el especialista, existe una gran discriminación hacia la cultura indígena, pues ni siquiera le llamamos religión, sino, usos y costumbres cuando sí se tiene un proceso religioso.

“Definitivamente hay una discriminación ante lo que es la cultura indígena en general, no solo la parte religiosa, los rarámuris son católicos en su mayoría pero practican un tipo de catolicismo que es diferente al de las ciudades. El lenguaje jurídico que se ha empleado con los indígenas es minorizarlos, ilustrando una relación de subordinación ante lo tradicional.”, explica Enrique Romero.

Características de un movimiento para ser considerado religión (RESALTAR)

Como explica el especialista, para que un movimiento sea considerado una religión, este tiene que tener ciertas características, tomando en cuenta que no existe una definición propia, desde el enfoque sociológico, para la religión.

Todo movimiento tiene que tener creencias acerca de lo sagrado y lo profano, pues las religiones codifican lo profano, todo aquello que está prohibido y que puede alterar el orden de las cosas, ese sería un primer componente de una creencia religiosa. “De igual manera se tiene un corpus de rituales que practican sus miembros; pueden ser de diferentes tipos, desde agradecer a la naturaleza, hasta para pasar de un estado a otro, como el bautismo y la confirmación, que hacen que el creyente pase de un estado que en antropología le llamamos liminal, es decir, un estado donde le hombre no está definido, a un estado santificación, por ejemplo, el bautismo es el primer ritual, luego viene la eucaristía. El creyente va creciendo en una escala evolutiva, ya que toda religión conduce a sus adeptos a un estado ideal del ser.”, explica Romero.

Único creyente del Islam en Chihuahua

Érick Ramírez, practicante del Islam sufismo desde hace aproximadamente 15 años, es el único practicante de esta religión en todo el estado de Chihuahua, uniéndose a través del grupo “Orden Nur Ashki Al-Jerrahi”, en la Ciudad de México.

Antes de unirse al Islam, Érick, no profesaba ningún tipo de religión, pero asegura que al conocer dicho grupo, la espiritualidad radicada en él, le llamó la atención y comenzó a practicarla.

Alá, su Dios, profesa el sufismo como la religión del amor, pues se busca que el hombre realice acciones buenas y obras que te acerquen a Él, marcando una serie de pautas que todo aquél que profese el Islam tiene que cumplir, destacando el hacer obras de caridad, el ayuno una vez al año, la oración al Corán 5 veces al día, entre otras.

En el país, según explica Érick, existen alrededor de 400 personas, pues es una vertiente pequeña del Islam que no es muy conocida. “Cuando comento que practico la religión, a la gente se le nota que no conoce el tema, en cuanto mencionas el Islam piensan en bombas y creen que eres terrorista. Después les da curiosidad y al explicarles, se les desaparece el prejuicio.”, asegura.

Isaí Villalobos, orgulloso del Metodismo

Metodista de nacimiento, Isaí, comenta que para él, decir que es metodista es todo un orgullo pues desde 1885 que se estableció la religión en Chihuahua, no ha dejado de ser parte del estado, resaltando que incluso, se encuentra inmersa en la arquitectura chihuahuense.

“En el metodismo, es libertad de la salvación, hay una idea en que Dios nos provee con gracia para salvarnos y nosotros aceptamos o no, pues tenemos la libertad de elección.”, asegura Isaí.

Algunas diferencias entre la religión Católica y la Metodista radican en la eucaristía, pues para los metodistas el pan y el vino, son una representación de Dios y del acto de Jesús, mientras que para los católicos, es el cuerpo de Cristo.

“Cuando digo que soy metodista, al principio me miran raro, ponen cara de que qué es eso…extraño, pero nunca he recibido miradas de rechazo o discriminación pues la comunidad se ha hecho abierta y ha dado pie a la pluralidad.”, asegura.

La iglesia de la Santísima Trinidad, ubicada detrás de Quinta Touché, es aquella en donde Isaí, de la mano de su abuela y madre practican su religión, resaltando que no se trata únicamente de una profesión de fe, sino de una actuación de la misma, en donde el actuar tiene que ser congruente a lo que se profese.

Actualmente, como explica Érick, la iglesia metodista se encuentra en varios municipios de la región, desde Ciudad Juárez o Delicias, hasta Camargo y parral, resaltando que su impacto cultural en el estado ha sido grande, pues incluso la escuela más antigua de Chihuahua, que es el Colegio Palmore, es metodista.

Un testigo fiel a su iglesia

Enrique Ramírez, lleva 10 años como testigo de Jehová, practicando el cristianismo que Jesús enseñó y que los apóstoles siguieron. El creyente destaca que algunas diferencias que existen entre su religión y otras es que cuando una persona muere, esta deja de existir, pues los muertos no están sufriendo en ningún infierno de fuego.

“Algo por lo que le soy fiel a mi religión es porque nosotros nos esforzamos por evitar cualquier tipo de división social, étnica, racial o de clase, pues creemos que eso separa el mundo y buscamos siempre un bien social.”, destaca Enrique.

Practicante de la religión más popular en México

“Para mí, ser católico es seguir con las enseñanzas familiares; cumplir con los mandamientos y seguir con los sacramentos. Sé que algunas personas han seguido un camino diferente, pero creo que las enseñanzas de Jesús y la virgen María, son únicas.”, asegura Alejandro M.

El joven de apenas 19 años de edad asegura que las situaciones religiosas a veces causan problemas, pero que siguiendo la palabra de Dios y ayudando al prójimo todo debería de salir adelante, pues independientemente de lo que se profese la ayuda al otro es lo que debería importar.

“Ninguna religión es perfecta, y cada quien decide creer en lo que mejor le convenga, pero todos tenemos que respetarnos.”, comenta el creyente.

¿Qué quiere decir ser ateo?

Como explica Susana, atea desde hace más de 15 años, ser ateo no significa no creer en Dios, ya que un ateo no se define en comparación con otros religiosos sino, en la manera en como cada persona visualiza el mundo, pues para ellos las preguntas existenciales no recaen en un ser supremo.

Para un ateo, la existencia tiene sentido por sí sola y no es necesario fundamentarla en alguien más o en otro ser, ya que la vida es perfecta tal cual es, pues Susana explica que la vida no es un fenómeno para comprender sino para experimentarla en su máximo resplandor.

“Uno de los errores de los creyentes es que piensan que sin religión no hay valores, pero eso no es verdad, pues surgen de lo humano, de las expresiones humanistas de este mundo.”, explica Susana.

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