“Nos dijeron que los trenes ya no van a salir hasta enero”, fue el comentario que brindó una de los poco más de 2 mil 500 personas en situación de movilidad que se encuentran varadas en la ciudad de Chihuahua.
Hasta el momento no se ha confirmado dicha información brindada por los migrantes que se encuentran acampando junto a las vías del tren al sur de la ciudad, en la colonia Concordia, donde los ciudadanos chihuahuenses les brindan de agua y electricidad para cargar sus celulares.
Según contaron los cientos de extranjeros, los trabajadores de Ferromex les pidieron que se hicieran a un lado de las vías para realizar maniobras para la salida de un tren, por lo que, con tal de subirse a uno de los vagones, obedecieron y se quedaron durante horas esperando a que dicho tren apareciera.
“Si hubiera otra opción para salir de aquí, nos íbamos”, comentó una venezolana con sus hijos a un lado, quien a pesar de la desesperación por llegar a su destino Estados Unidos, no piensa poner en peligro a sus niños subiéndose al techo de un tren con ellos.
Esta es una de las razones por las cuales han estado durante tantos días en la ciudad, debido a que la única opción para continuar el viaje, es subirse a los techos de los vagones y sujetarse lo mejor que puedan para no caer, soportando el helado viento y el movimiento del tren.
Aquellos extranjeros que llegaron en un vagón con capacidad para albergar a los migrantes dentro, fueron obligados a bajarse por los elementos de la Guardia Nacional y militares, además, de estar presentes los agentes de la policía municipal y guardias de Ferromex.
Durante casi una semana les han dicho que el tren hacia la Ciudad Juárez saldrá en una hora, para luego cambiar el horario dos o cuatro más tarde o bien, hasta el siguiente día, lo cual tiene molestos a los migrantes.
“Nos dicen que nadie nos mandó a venir para acá, pero ningún de acá sabe la situación que estábamos viviendo en nuestro país”, comentó una madre venezolana, quien a pesar de saber el peligro del viaje en el que se embarcó junto con su familia, decidió que era lo mejor para sobrevivir.
Por otro lado, muchos de los extranjeros han comenzado a dudar sobre si fue buena idea haber emprendido dicha travesía, dado a que muchos de los niños y niñas que se encuentran viajando con sus padres tienen enfermedades respiratorias.
Durante el viernes 22 de diciembre, muchos padres de familia venezolanos informaron que sus hijos habían sufrido de crisis de asma durante la noche, temen que sus niños no sobrevivan el invierno en México.
Publicado originalmente por El Heraldo de Chihuahua