Leonardo Portillo Gil, el hermano mayor de José Noriel Portillo Gil, sería uno de los sucesores para continuar con el mando que dejó el Chueco, esto dentro del municipio de Urique, pues de acuerdo con el organigrama criminal elaborado por la Fiscalía General del Estado, es uno de sus hombres de confianza desde hace más de cinco años y quien tiene mayor vínculo familiar.
Le apodan el Cinco y las áreas de inteligencia lo colocan como el segundo al mando de la estructura criminal, pero, por otra parte, también identifican al brazo armado que dirigía un sujeto que no se ha podido identificar, pero que lo apodan el Makako, ambos con residencia registrada en la comunidad de Bahuichivo, dentro del municipio de Urique.
Leonardo es un joven de 34 años y de acuerdo con los datos personales a los que tuvo acceso El Heraldo de Chihuahua, nació el 6 de noviembre de 1988 y desde hace más de cinco años se habría integrado a la organización criminal que dirigió su hermano (el Chueco), quien el pasado 18 de marzo fue localizado sin vida en una región de Sinaloa.
Dentro de la estructura y como principal operador se encontraba Gilberto Portillo Vega, conocido o apodado el Shakira, quien es un primo de José Noriel, quien el 11 de agosto de 2022 fue capturado por elementos de los tres niveles de gobierno, cuando se resguardaba en un campamento improvisado en la comunidad de Tubares, en el camino que conduce de Urique a Choix, en Sinaloa, lugar que conduce al área donde fue asesinado el Chueco en días pasados.
El papa del Shakira, de acuerdo con los registros oficiales del Estado y del mismo Ayuntamiento de Urique, fue el director de Seguridad Pública Municipal, mismo que fue identificado como Carlos P. M., según el informe al que obtuvo acceso El Heraldo de Chihuahua sobre la estructura elaborada por las áreas de inteligencia de la Fiscalía General del Estado.
A pesar de que a Gilberto Portillo lo capturaron en un camino que conduce a Sinaloa, su zona de operación que se mantiene registrada en las bases oficiales es en la comunidad de Cerocahui, donde hace casi un año José Noriel asesinó a dos sacerdotes, a un guía de turistas y a un joven, todos habitantes de esa misma comunidad.
Según el mismo informe, otro de los presuntos colaboradores del Chueco y que se encuentra al servicio del Cártel de Sinaloa es un sujeto de nombre Baudencio P. U., quien se encuentra como encargado de las comunidades cercanas a Batopilas, sin salir del municipio de Urique, dentro de la Sierra Tarahumara.
Cerca de la comunidad de Pitorreal, en el municipio de Ocampo, pero de lado de Urique, en la comunidad de San Rafael, la corporación identifica a un sujeto de nombre Martín M., a quien apodan o refieren como el Cochero, quien además de encabezar la distribución de drogas es acusado de haber asesinado a varios ejidatarios de Monterde y por haber desplazado a varias familias que se negaron a trabajar con el presunto criminal.
Existen más miembros de este grupo criminal que dejó de dirigir el Chueco y quienes podrían continuar con sus labores criminales en esa zona del estado, ahora que no se encuentra el presunto líder criminal que fue abatido por su mismo grupo para quien operaba en el estado de Sinaloa.
En Fiscalía General del Estado hay información, así como extraoficial, relacionada con otras detenciones y las intervenciones que han realizado en el municipio de Urique, donde se ha proporcionado información de un sujeto de nombre “Edelmiro”, quien es un integrante de La Línea (grupo contrario) y quien contaría con apoyo de mandos de seguridad para buscar desplazar a José Noriel cuando seguía con vida.
Esta versión no ha sido confirmada por las autoridades, pero forma parte de las labores de inteligencia y operativos terrestres que siguen desarrollando para detectar los reajustes que realizan en esa zona del estado, además de que aseguraron que los operativos siguen de forma permanente aunque hayan localizado al Chueco sin vida.
Cabe mencionar que la mayoría de la zona occidente y sur del estado se encuentra “controlada” por miembros del Cártel de Sinaloa, quienes fueron los presuntos responsables de haber asesinado a José Noriel en los límites entre Chihuahua y Sinaloa, cuyo cuerpo fue recuperado por autoridades de aquella entidad.
Publicado originalmente por El Heraldo de Chihuahua