Las investigaciones en torno al caso de Laura Ávila, ciudadana norteamericana que se encuentra en coma por una mala cirugía estética, llevaron a la Fiscalía General del Estado en la Zona Norte a realizar un cateo en la clínica Rinocenter, ubicada sobre la avenida Adolfo López Mateos.
Jorge Nava López, Fiscal de Distrito, dijo en entrevista que se logró recabar evidencia y el aseguramiento del expediente clínico de la paciente, así como del procedimiento médico que se le realizó.
Nava dijo que todos estos datos importantes están bajo investigación y con la opinión técnico médica de peritos especializados para que den a conocer si el procedimiento realizado fue el correcto.
Además se solicitaron los informes de la clínica y el personal médico que intervino para conocer si están certificados para realizar este tipo de cirugías plásticas o si operan de manera ilegal.
Sin embargo, según dijo, dicho nosocomio cuenta con cartas responsivas firmadas por la joven originaria de Dallas, Texas, las cuales serán utilizadas por la defensa para deslindar responsabilidades.
Por su parte, el Colegio Estatal de Cirujanos Plásticos mostró su postura el pasado martes 13 de noviembre y lamentaron que este tipo de prácticas que sigan dando con el consentimiento de las autoridades.
Saúl Delgado, presidente del colegio dijo que en lo que va del año se han registrado por lo menos dos muertes por cirugías en clínicas "patito", realizadas por médicos sin conocimiento en la subespecialidad de cirugía estética.
Actualmente, Laura Ávila se debate entre la vida y la muerte en un hospital de El Paso, Texas, luego de que el pasado 30 de octubre acudió a Rinocenter para una rinoplastia, sin embargo, durante la operación, tuvo complicaciones que la llevaron a un paro cardíaco de 4 minutos, el cual provocó daño cerebral.
Su familia busca recabar fondos a través de la organización GoFundMe, logrando recabar hasta el 14 de noviembre la cantidad de 71 mil 892 dólares, de los 150 mil dólares proyectados como meta para su atención médica.
