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Los amantes de lo ajeno han buscado aprovechar las ausencias en los planteles educativos para apoderarse de toda cosa de valor que pueda ser vendida fácilmente, como ocurrió en la escuela primaria Francisco I. Madero, ubicada en la colonia Chaveña.
La noche del miércoles, directivos y docentes del plantel dieron aviso a los números de emergencia sobre el robo de equipo de cómputo, motores de aires acondicionados y algunos electrodomésticos, además de que vandalizaron el edificio.
La escuela se encuentra ubicada en el cruce de las calles Libertad y Manuel Ojinaga, en el mercado de Los Herrajeros y justo frente a la clínica 47 del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Este sería el tercer plantel que es víctima de la delincuencia en la ciudad, ya que lamentablemente, muchas de estas escuelas no cuentan con los recursos para pagar un velador y esto hace que sean blanco fácil.
Los afectados mostraron cómo los delincuentes primero rompieron el candado de la Dirección y Biblioteca para ingresar, tomando los juegos de llaves de todos los salones, para después entrar de uno en uno, tirando libros, archivos, material didáctico y de oficina.
Además, en aquellos salones donde no pudieron ingresar, utilizaron el sistema de ductos y archiveros, para poder subir a ellos, rompiendo todas las ventanas y haciendo boquetes en las paredes.
Por el momento, desconocen el monto de lo robado, ya que esperan hacer un arqueo con todo lo sustraído y el valor de cada una de las computadoras, así como el total de los daños al inmueble y los salones.
El plantel cuenta con un puente que conecta con unas canchas y un área de estacionamiento para maestros, que está pegado a los patios de Ferromex y se cree que por ahí pudieron haber ingresado, porque las rejas fueron dobladas.
Ya después, usaron las otras puertas de salida al tener las llaves, lo que les hace suponer que entraron en varias ocasiones para llevarse poco a poco las cosas.
Jaime Martínez, subdirector del plantel, pidió el apoyo de Gobierno del Estado para poder reparar los daños y volver a adquirir los equipos de cómputo y el material de oficina robado, antes de que reanuden las clases, el próximo mes de agosto.
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