Ciudad Juárez, Chihuahua.- A pesar de los años y la amplia variedad que actualmente existe en disfraces, los juarenses siguen prefiriendo la tradicional catrina, para representar las fechas de esta temporada como los son Halloween y el Día de Muertos.

Según Marisela Juárez, vendedora de disfraces de segunda mano y quien lleva más de 4 años en este mercado, especificó que la gente aún sigue buscando el disfraz de catrina y calavera.

Sin importar la edad, la gente llega preguntando por los populares disfraces que a lo largo de los años han vestido estas fechas, la catrina o el catrín, idea a la que recurren muchos mexicanos y que incluso ha sido adoptado por países extranjeros por las famosas leyendas que hacen de México una historia llena de tradición.

“De los cuatro años que llevo vendiendo, siempre se vende este disfraz ya sea que venga una señora de 30 años a buscarlo para ella o para su hija de seis años”, comentó.

Dijo que fue hace tan solo dos semanas que se instaló fuera de su hogar, ubicado en la calle Cartagena para que la gente que fuera pasando pudiera observar la gran variedad de disfraces que están colgados sobre el barandal, sin embargo, en ocasiones llegan directo por el vestido típico de catrina sin observar los demás.

Pese a los distintos modelos, entre ellos de princesas, personajes famosos de películas o fantasmas, la gente sigue preguntando por el más sencillo, pero más bonito, el de catrina, mencionó Marisela.

Quien recordó como ella durante muchos años, recurrió de la misma manera a este disfraz, por las diferentes historias, combinaciones y colores que representa este atuendo, además de ser el que nunca le fallaba.

No solo en Ciudad Juárez, sino alrededor del país, la gente aprovecha el día de muertos para figurar este retrato que hoy en día es algo tradicional de México, además, imagen que no puede faltar en esta festividad que arraiga desde los tiempos prehispánicos, por simbolizar la celebridad a la muerte.

Marisela, también dijo que la gente ha optado por comprar los disfraces de segunda mano, debido a que sus precios no rebasan los 100 pesos.