Ciudad Juárez, Chihuahua.- El número de migrantes que se encuentran en la Casa del Migrante se redujo a menos de 60 personas el día de ayer domingo, por lo que se puede considerar una baja considerable luego del sobrecupo que se registró en semanas anteriores.

La coordinadora de la Casa del Migrante, Ivonne informó que las autoridades norteamericanas siguen solicitando entre 20 a 30 migrantes por la mañana y por la tarde para solicitar asilo político en la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).

Por la mañana del domingo cruzaron 23 migrantes centroamericanos y cubanos, mientras que por la tarde solicitaron 30 personas más para solicitar asilo político en Estados Unidos.

Dasiel Pozas expuso que salió de Cuba precisamente el 24 de diciembre con rumbo a Panamá con la finalidad de iniciar la travesía a esta frontera para cruzar a Estados Unidos.

Explicó que de panamá se dirigió a la frontera de México para cruzar a Tapachula Chiapas donde estuvieron 16 días debido a los cambios migratorios de las autoridades mexicanas por el nuevo gobierno.

Fue el viernes pasado cuando llegaron a Ciudad Juárez un grupo de 5 personas quienes se dirigieron directamente a la Casa del Migrante para iniciar su proceso de petición a las autoridades norteamericanas.

Dasiel externó que decidieron hospedarse en un hotel de la avenida Lerdo para esperar su turno y solo bastó dos días de estancia en la frontera cuando fueron requeridos para cruzar por el puente internacional Paso del Norte.

Los migrantes cubanos expresaron su emoción al informarles que les tocaba el turno según el número que les entregaron en la Casa del Migrante para cruzar a Estados Unidos.

Dasiel Pozas comentó que apenas llegaron el pasado viernes y ya le informaron que era su turno para ser trasladado al cruce internacional para ser entregado a las autoridades de Estados Unidos.

Indicó que tiene toda la esperanza de ser aceptado su petición de asilo, ya que tiene a su esposa y familia en la unión americana, además que se considera una persona trabajadora, sin ningún antecedente delincuencial y no es una carga para el gobierno de Estados Unidos.