Santiago González, titular de Derechos Humanos, informó que en el albergue municipal Kiki Romero sólo quedan 14 personas migrantes, mientras que en la carpa provisional hay poco más de 100 personas.
Desde que comenzó el 2024, el flujo migratorio ha ido disminuyendo aunque siguen llegando migrantes.
“En la carpa tenemos menos de 100 personas pero sí ha estado circulando gente, unos salen y otros entran”, comentó González.
Destacó que la población de migrantes que está predominando es Guatemala, es de las poblaciones que más ha estado aumentando en estos días después de Venezuela.
Respecto a retirar la carpa provisional que instaló el gobierno federal en conjunto con el municipio, el derechohumanista informó que está muy atentos a los flujos, pero quién tendría la decisión de cerrar o no, primeramente sería ver los temas administrativos por los contratos y como funciona con recurso federal sería ellos quien determina hasta qué momento estaría ese albergue temporal en funcionamiento.
El gobierno municipal, también abrió el 6 de febrero el albergue Felipe Ángeles, el cual han recibido muy pocas familias que llegan de Guatemala y Venezuela, en una semana han albergado a aproximadamente 30 personas y actualmente sólo hay dos núcleos familiares.
“El albergue Felipe Ángeles, es un espacio muy bien equipado, es para puras familias y el objetivo es que estén ahí y esperen sus citas de CBP One y generen su entrada de manera regular”, destacó González.
Por su parte el padre Francisco Bueno, director de la Casa del Migrante informó que a la fecha albergan a 155 personas originarias de Venezuela, Guatemala, Honduras y México.