La Cuarta Transformación encabezada por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, ha sido objeto de un intenso debate en México sobre si representa un avance o un retroceso para el país. Es fácil comparar esta etapa histórica con el llamado "maximato" que tuvo lugar hace casi 100 años con Plutarco Elías Calles como jefe máximo de la revolución mexicana, fundador del antecesor del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Existen argumentos que respaldan la idea de que la Cuarta Transformación podría considerarse un retroceso en comparación con el régimen de Calles. Durante el maximato, Calles estableció un fuerte control y centralización del poder en el Partido Nacional Revolucionario (PNR), lo que generó preocupación por la concentración de poder en manos de un solo líder. De manera similar la Cuarta Transformación ha concentrado gran parte del poder político y toma de decisiones en la figura del presidente López Obrador fundador de morena, lo que podría resultar en una falta de contrapeso institucional que debilite el sistema democrático.
El Maximato como periodo historico que tuvo lugar en México desde 1928 hasta 1934, durante el cual Plutarco Elías Calles ejerció un control efectivo sobre la presidencia del país, a pesar de no ser oficialmente el presidente. Calles fue el fundador del Partido Nacional Revolucionario, antecesor del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Durante el Maximato, Calles implementó un modelo de gobierno conocido como "jefatura máxima", en el cual actuaba como un líder político influyente detrás de escena, controlando de manera indirecta a los presidentes en turno a los cuales el elegía. Durante este periodo, se promovieron políticas nacionalistas y se realizaron reformas sociales y económicas significativas.
Sin embargo, el Maximato también estuvo marcado por la represión política y la violación de los derechos humanos, con Calles tomando medidas enérgicas contra los opositores políticos y restringiendo la libertad de prensa. Además, el Maximato exacerbó las tensiones entre el gobierno y la Iglesia Católica, culminando en la Guerra Cristera.
Durante el maximato, se buscaba mantener el control político y económico a través de la cooptación y represión de los opositores, lo que llevó a una fuerte centralización del poder. Por otro lado, la Cuarta Transformación ha promovido una agenda basada en las decisiones del presidente de la República, quien, a un año de dejar el puesto, parece perfilarse como el nuevo poder tras la silla presidencial. La reciente consulta interna de MORENA para definir al candidato del partido en el poder parece más un dedazo de López Obrador, utilizando las antiguas prácticas priistas, logrando imponer a su candidata.
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"A lo largo de los años, el país ha fortalecido sus instituciones democráticas y ha logrado una mayor consolidación en términos de separación de poderes y pluralidad política. Sin embargo, en la actualidad, estas libertades se han visto opacadas por el ejecutivo, quien busca sobreponerse a los otros poderes, el legislativo y el judicial, en aras de centralizar el poder en la Cuarta Transformación. Esta situación ha generado inquietud tanto en las instituciones como en la sociedad civil mexicana, que se encuentran en una encrucijada, pues las divisiones existentes dificultan frenar cualquier intento de abuso de poder.
En última instancia, el debate sobre si la Cuarta Transformación es un retroceso o un avance es complejo y depende de la perspectiva de cada individuo. Es importante reconocer que la historia no se repite de manera idéntica y que cada etapa política tiene sus particularidades. La Cuarta Transformación ha generado cambios significativos en la política mex…
