Hace daños que decidió emigrar de su país de origen El Salvador a México con la firme intención de abrirse paso en la música urbana y de poder ofrecer a su familia una mejor forma de vida, fue así como llegó a Chiapas y se fue dando su estadía en este país.
Hasta que llegó a Ciudad Juárez, y ya establecido en esta frontera empezó trabajar en el área de la peluquería donde ha destacado de manera notable y se fue adaptando a las costumbres, clima y comida en esta localidad, así nació Cris Mejía (El de la batuta bendecida).
Sí, bendecida porque tiene unos meses que dejó atrás la música del mundo, de cantar letras de su inspiración en el reguetón, rap y corridos tumbados donde fincó una carrera que se coronó de logros y éxitos en sus redes sociales, canal de YouTube y plataformas digitales y le fue de maravilla en sus conciertos y presentaciones en vivo.
Pero de repente quiso dar otro salto importante en su vida, de ya no escribir letras para el mundo y de entregarse de lleno a la música cristiana y dejar de largo todo lo célico, abandonó por completo los antros, centros de diversión donde se presentaba y le iba bastante bien y no cambia lo que ahora vive, lo dice de una manera muy clara y con rostro muy enamorado de lo que hace en su religión cristiana.
Y se ve más tranquilo, relajado ya que no quiere seguir en la música del mundo, sino todo lo contrario, comienza su carrera en el ámbito cristiano con un tema que se titula “Te alabaré” donde se proyecta de manera diferente tanto en su voz, como en su vestuario y su manera de conducirse es ciento por ciento diferente a ese Cris Mejía de meses atrás.
Ahora con su nuevo estilo de vida se siente realizado, ama lo que está creando en cuanto a la música con el tema “Te alabaré”, está entrando de lleno a la música y a las corrientes cristianas, sigue siendo cantautor y productor, se siente completamente realizado con su nueva forma de viva y considera que su estadía por Ciudad Juárez le ha enseñado y dado muchas cosas, no solo de manera personal, sino en su carrera en la música.
Es un salvadoreño que nunca ha dejado de luchar por sus sueños y agradece a México por todas las oportunidades que ha tenido en su faceta de artista y como peluquero, Cris Mejía se ve de manera diferente, seguirá haciendo temas en honor a Cristo y busca seguir vigente en el gusto de su gente.
Y estar en lo que ama eso lo motiva más para no dejarse caer, es un hombre valiente que renunció a todo por partir a un país diferente al suyo en todos los sentidos, agradece cuando decidió emigrar y el apoyo que ha recibido ha sido lo máximo para este artista que seguro llegará al éxito en la religión cristiana.
Mejía estuvo por El Heraldo de Juárez, un hombre diferente, con más razonamiento y con muchas ganas de realizarse, de no abandonar su música y es de admirar cuando le iba bastante bien en la música de mundo, deja todo y ahora se identifica con lo que escribe, en sus letras habla de Cristo y deja fluir su corazón lleno de amor y de respeto.