El 11 de agosto del 2014, Robin Williams fue localizado muerto tras suicidarse debido a problemas de depresión y adicciones. +
Hoy en memoria del actor y por su quinto aniversario luctuoso será transmitido el documental “When the Laughter Stops” en la red estadounidense REELZ.
Este material revela cómo el actor, que habitualmente traía risas y alegría a sus innumerables admiradores, mantuvo en secreto sus batallas personales de salud.
A través de entrevistas con su círculo íntimo, se da a conocer su lucha contra la enfermedad de Parkinson y la depresión que durante los últimos meses afectó su vida.
"Si bien estaba feliz de hablar públicamente sobre sus adicciones tanto del alcohol como de las drogas, mantuvo para el solo su batalla más larga y dolorosa con la enfermedad de Parkinson", dice el vicepresidente y director de contenido de AMI, Dylan Howard.
Aunque Robin llevó luz a las vidas de otras personas, pocas veces ofreció una mirada a la oscuridad que había en su propia vida.
Cabe destacar, que días después de que el suicidio de Williams impactara al mundo de Hollywood, su viuda Susan Schneider, emitió un comunicado para hablar de cómo fueron sus últimas semanas.
"Pasó gran parte de su vida ayudando a los demás. Ya fuese entreteniéndolos en el escenario, en el cine, la televisión o con las tropas en primera línea. Si hacía falta, ayudando a olvidar el dolor a niños enfermos. Robin sólo quería hacernos reír, que se perdiese el miedo".
El comediante sabía que estaba en fase temprana de la enfermedad y nunca tuvo intenciones de hacer público el padecimiento.
Durante su trayectoria, ganó un Oscar, cinco Globos de Oro, un Premio del Sindicato de Actores, dos Premios Emmy y tres Premios Grammy.
Películas como Patch Adams, Dead Poets Society, Jumanji, Good Morning Vietnam y Mrs. Doubtfire fueron las que le dieron fama internacional.
Con información de El Sol de Sinaloa