Es imperativa la diversificación económica de la ciudad, para que su desarrollo y crecimiento no dependa exclusivamente de la actividad que desarrolla la industria maquiladora manufacturera de exportación, que si bien no debe dejarse de lado es necesario reforzarlo con otras ramas empresariales, consideró Isaac Sánchez Juárez, maestro en Economía de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.

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Dijo que actualmente en el país se tiene un escenario de coyuntura compleja. Debido a que en el 2019 la economía se contrajo, lo que no había ocurrido desde el 2009, cuando producto del contagio de la crisis en Norteamérica, en nuestro país se vivieron condiciones similares.

Destacó que el sector maquilador ha sido de enseñanza para muchos profesionistas que actualmente tienen sus empresas, quienes aprendieron de la forma de operar de esa industria y ahora ya lo aplican con nuevas compañías, sólo que ya de origen nacional.

Hoy saben hacer prácticamente todo y lo único que requieren algunos de ellos es de capital para instalarse o crecer y el recurso no puede venir más que del Estado, indicó,

“Las experiencias de Corea del Sur, de Alemania, nos indican que estos países se convirtieron en grandes campeones del planeta, precisamente porque lograron detectar empresarios, emprendedores e innovadores a los que se les tenía que dar todo el apoyo estatal para que pudieran tener éxito, de otra forma no lo hubieran logrado, agregó.

El maestro reconoció que desde hace años se habla de diversificar la economía de Ciudad Juárez, sin embargo, ha faltado compromiso de todos, en especial de las autoridades.

“Finalmente todos somos culpables de esta ausencia de cambio de modelo económico de la ciudad, pero los principales culpables son los gobernantes porque nosotros descargamos en ellos esa tarea y en cierta forma les pagamos para que realicen esas transformaciones y han sido incapaces de hacerlo”, enfatizó.

En conclusión, lo que necesitamos, dijo, son gobiernos menos corruptos, más eficientes, que actúen de forma transparente y realmente cumplan lo que proponen durante sus campañas, conformadas por largas listas de buenos deseos que al final se quedan en eso, porque durante décadas no hemos visto que sus declaraciones se vuelvan realidad.

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