La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) dejó estables las tasas de interés el miércoles y señaló que probablemente se mantendrán indefinidamente sin cambios, con una economía que crecerá a un ritmo moderado y con un bajo desempleo en un año de elecciones presidenciales en ese país.
"Nuestro panorama se mantiene favorable, pese a los desarrollos globales y los riesgos actuales", dijo el jefe de la Fed, Jerome Powell, en conferencia de prensa.
"Creemos que la política monetaria está bien posicionada para servir a los estadounidenses al apoyar el continuo crecimiento económico, un sólido mercado laboral y la inflación cerca de nuestra meta de dos por ciento”.
La decisión dejó la tasa de fondos federales entre 1.5 y 1.75 por ciento, y 13 de 17 funcionarios no esperan cambios hasta al menos 2021. Los otros cuatro anticipan una sola alza el próximo año.
Destacó que ningún miembro de la Fed haya sugerido que serían apropiadas tasas más bajas el próximo año, una señal de que el banco central estadounidense siente que ha diseñado un "aterrizaje suave" después de un año volátil en el que aumentaron los riesgos de recesión, se invirtió la curva de rendimiento de los bonos y la política comercial sacudió a los mercados.
"El comité juzga que la postura actual de la política monetaria es apropiada para apoyar la expansión sostenida de la actividad económica, las fuertes condiciones del mercado laboral y la inflación cerca del (...) objetivo simétrico de dos por ciento", dijo la Fed en un comunicado después del final de la reunión de dos días.
En medio de la guerra comercial con China, las autoridades de la Fed dijeron que seguirían vigilando "los desarrollos globales" para decidir si se necesita cambiar las tasas. También afirmaron que se mantendrían atentos a las "contenidas presiones inflacionarias", un reflejo de la preocupación de que el ritmo de incremento de los precios no haya alcanzado el objetivo.
Tras la reunión de octubre, Powell había considerado que debería producirse un cambio "material" en las perspectivas económicas para que la Fed decida un cambio en los costos del crédito, luego de tres recortes este año.