México tiene esculturas y monumentos que lo hacen crearse una identidad. Claro, además de su gente, sus costumbres y su comida y otros simbolismos, son los monumentos los que, al imaginarse al país o ciudad fuera de ella, hay una imagen representativa que siempre está presente.
Es ese el caso de Ciudad Juárez; una ciudad con altibajos constantes, pero con la calidez de su gente, acompañada de un monumento cuya plaza es sede de la unión de juarenses y visitantes de todos los lugares del mundo: el Monumento a la Mexicanidad.
El Monumento a la Mexicanidad tiene más de una década en la frontera, inaugurado el 24 de mayo de 2013 y diseñado por el artista mexicano Enrique Carbajal, conocido como Sebastián. Su estructura se encuentra construida con acero, tiene una altura de 64 metros y tiene un peso de alrededor de 800 toneladas.
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La famosa “X” es de color roja, y justo en su mitad tiene un ventanal negro, que, se dice, simboliza un ojo, ya que al llegar por un elevador desde el interior, se puede observar a la frontera con una visión panorámica.
Ciudad Juárez, donde comienza la patria
La frontera históricamente es reconocida porque fue un refugio en donde Benito Juárez logró gobernar al país, teniendo en ella su Palacio Nacional, en donde en 1865 fue la oficina de Correos de México, siendo esta la entonces Paso del Norte que además fue la corona territorial del país y capital de México.
Esto, para el artista Sebastián tuvo gran relevancia al momento de diseñar el muy conocido monumento, ya que se cuenta, durante el mandato de Benito Juárez en México, cambió el nombre del país a “Méjico”, reemplazando la X por una J, como signo de rebeldía, ya que los españoles le decían así porque no existía la pronunciación con la primera letra en España.
Otro de los simbolismos que además han sido confirmados por el artista Sebastián es que la X es una representación de mestizaje, como un encuentro de las culturas españolas e indígenas en México, que hoy reflejan la historia de un país colonizado.
Una característica especial del Monumento a la Mexicanidad es que una de sus puntas superiores parece inconclusa, reflejando con ello los interminables esfuerzos por mejorar los ideales de Ciudad Juárez y además de la nación.
Esta escultura se encuentra en la Plaza de la Mexicanidad, entre los terrenos del Chamizal y a un costado de la franja fronteriza de que divide a México de Estados Unidos, viéndose la “X” desde una larga distancia de la ciudad vecina El Paso.
Hoy esta plaza es punto de reunión para todos los fronterizos, sede en de los eventos, conciertos y tradiciones que son festejadas y además alumbradas por el espectáculo de luces que por las noches sale del gran monumento que une a los juarenses y al resto de los visitantes.