Si hay una edificación que todo juarense ha visto en más de una ocasión, es el de la "bola" gigante, en la curva de San Lorenzo, misma que durante los finales de la década de los ochenta fue un innovador estilo de restaurante, que por las noches, se volvía un bar.
La razón por la que este edificio no continuó funcionando tiene un par de versiones, pero la más conocida por ser la más "lógica" es que la forma, así como los ventanales con los que estaba diseñado, hacían que durante la temporada de invierno, este lugar alcanzaba temperaturas extremadamente bajas, mientras que durante el verano, era casi como entrar en un horno.
Y aunque se intentaron colocar paneles que nivelaran las temperaturas extremas de la ciudad dentro del restaurante-bar, finalmente quedó abandonado, siendo hoy una especie de monumento cuyo interior guarda cientos de historias.
¿Fantasmas en el Gardié?
Desde entonces, cientos de personas curiosas han entrado a este misterioso edificio, tomando fotografías y videos por la gran curiosidad, ya que su forma, que asemeja ser un cono de nieve, es de las más interesantes de la ciudad.
Es este mismo interés por el que las personas entran y se imaginan qué es lo que pudo ser de este gran edificio, pero también sus misterios, por lo que más de uno ha asegurado ver un ente merodeando en el antiguo edificio.
Entre las historias más contadas de los "visitantes" de estas ruinas, está la de una mujer bailando por los rincones de esta "bola de nieve" en un vestido blanco, entre el polvo y la basura acumulada por los años.
Otra de las historias que se cuentan, es sobre una niña, igualmente vestida del blanco, que corre también por los rincones, así como los escalones y otros lugares ocultos de este icónico edificio.
Sin embargo, no hay ningún registro, así como ninguna foto o video de algún fantasma o aparición en el Gardié, aunque por la antigüedad y décadas que tiene, no hay que descartar esta posibilidad, a menos que intentes comprobarlo por ti mismo. ¿Te atreverías a entrar a la gran bola?