En Ciudad Juárez hay una inversión de cien millones de pesos, aproximadamente, en canchas privadas de futbol rápido, las cuales no han recibido la autorización por parte del Consejo de Salud y el Instituto Chihuahuense del Deporte para realizar juegos, debido a la contingencia del Covid-19.
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Juan Pedro Santa Rosa, titular del Instituto Chihuahuense se reunió en días pasados con propietarios de canchas, en la ciudad de Chihuahua.
“Llegamos al acuerdo de interceder por ellos ante el Consejo de Salud, quienes toman decisiones en varios sentidos, si es muy cierto que el riesgo de contagio es probablemente uno de los argumentos que más peso tiene, ya vimos la posibilidad de reactivar el futbol, que está hasta la etapa verde, queda una posibilidad, no confirmada de a lo mejor poder reactivar en etapa amarilla”, informó Santa Rosa.
Destacó que los torneos probablemente no se puedan reactivar, se pudieran probablemente escuelas.
“Es lo que estamos negociando, estamos proponiendo, no es que estén congeladas, las decisiones se tienen que tomar en base a números, en base a número de contagios, de la capacidad hospitalaria, incremento de fallecidos etcétera, hablo de todos los deportes, tengo que ver por el deporte en general”, indicó.
En la reunión hubo representación de las canchas de Ciudad Juárez, quien presentó un protocolo sanitario.
“Le hicimos saber de varios puntos que no están tomando en cuenta y es un error en el que estamos cayendo, están pensando en el protocolo de los jugadores pero cuando haces un protocolo de manera profesional piensas en todos los visitantes y no tienen medidas para los empleados, por ejemplo”, dijo.
El directivo comentó que en el tema de academias el que corre más riesgo es el entrenador, porque recibe varias partículas de diferentes personas.
“No se hace el protocolo para el entrenador, pensaron en la desesperación que tienen de ingresar dinero, pensaron en el protocolo del cliente pero no de los empleados”, señaló.
Enfatizó que para realizar un protocolo correcto existen expertos, epidemiólogos y en ocasiones se recurre a doctores de la Coespris, del ISSSTE, del IMSS.
La iniciativa privada ha invertido en esta frontera un aproximado de cien millones de pesos en las canchas de futbol rápido.
“Lo que queremos evitar dentro del Consejo Estatal de Salud es tener que decirle a un paciente que nos disculpe que le tenemos que quitar el respirador, no hay suficientes y se lo tenemos que dar a alguien con más probabilidades de vivir”, expresó.
“Cuánto vale eso, como se lo explicas a la familia, que precio le ponemos para ponerlo en la balanza si conviene o no abrir, porque es muy fácil decir hay que activar la economía y las sesenta mil familias en México que están sufriendo, las decisiones como Gobierno del Estado son bien complicadas y que está reapertura tiene que ir siendo gradual”, finalizó.
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