Parral, Chihuahua.- Nuestra Señora de la Soledad es una variante de advocación de la Virgen María del título de Nuestra Señora de los Dolores, y es venerada en la Iglesia católica. Viste de negro porque representa el dolor, el luto de la Virgen María debido a la muerte de su hijo, Jesucristo.
La Casa Real de Francia tuvo especial devoción a María Santísima en su misterio de la Soledad, y fue introducida en España por Isabel de Valois, hija de Enrique II de Francia y de Catalina de Médici, que contrajo matrimonio con Felipe II de España.
Esta virgen, la virgen de la Soledad, llegó a Parral, según la leyenda popular, en el siglo XVII, después de una peste que azotó a la región y en especial a los mineros. Un minero adinerado decidió, en su lecho de muerte, pedir su imagen consiguiéndosela de madera. la leyenda cuanta que el minero murió, pero la peste cesó.
Es por ello que esta imagen se convirtió en la patrona de los mineros, y actualmente se encuentra en el templo de San Juan de Dios edificado en el siglo XVII, el cual contiene un retablo de estilo barroco del siglo XVIII, aunque no siempre fue este el lugar de la patrona de los mineros, antes estuvo en el templo de San José, pero no hay datos que indiquen en que tiempo mudó de residencia o la razón de ello.
Esta virgen, es una pieza de culto tradicional, y Cesar De La Riva, encargado del Área de Bienes Muebles del Instituto Nacional de Antropología e Historia, viajó hasta Parral para registrar y analizar la pieza, que es un bien histórico, además de un bien cultural y religioso.
La pieza ha sido intervenida, por diversas manos, no expertas y de buena voluntad, asegura De la Riva, pero que ha mermado la originalidad de la misma. Por ejemplo, las lágrimas que antes brotaban de sus ojos, se han perdido después de estas intervenciones, por lo que, De la Riva, pide a los feligreses y a las autoridades eclesiásticas que busquen, en un futuro, el asesoramiento del INAH para lograr restauraciones profesionales.
La virgen ha sido fotografiada en repetidas ocasiones y épocas, este material también se recolectó por el encargado de la Fototeca del INAH Chihuahua, Jorge Meléndez.
Esta pieza es importante por la devoción que representa, pero también por la historia que cuenta y cada año sale desde el templo de San Juan de Dios en procesión, es por esto que el INAH busca preservarla, como a todas las expresiones de la cultura y la historia de nuestro país.