/ jueves 17 de octubre de 2024

Punto y aparte / Charla con mi amiga Ligia

“Un escritor (a) no escoge sus temas, son los temas quienes le escogen”

  • Vargas llosa -

La cita fue un lunes de septiembre por la tarde en un agradable café de la colonia Lomas de Chapultepec de la ciudad de México; la puntualidad inglesa me permitió conocer un poco los alrededores del lugar custodiados por enormes árboles que representaban el pulmón que da oxígeno a los visitantes, el escenario era más que envidiable. La elegancia de su persona fue notoria en cuanto mi amiga entró al café, nos sentamos frente a frente, una pequeña mesa de madera y una vela encendida fueron testigo de una interesante charla entre este servidor y la escritora Ligia Urroz.

Nicaragüense de nacimiento, mexicana por decisión propia, mujer de letras, columnista, guitarrista perteneciente al grupo de rock “Octubre XX” que toca rolas de los años 80, más de dos décadas funcionaria en el sector financiero, esposa, madre de tres dinámicos jóvenes, inteligente, fuerte, pero sobre todo muy divertida son las características que se tejen alrededor de la vida de mi amiga Ligia con quien comparto el gusto por la música de Men at work, Def Leppard y Miguel Bosé además de algunas coincidencias con el país español.

Dentro de nuestra conversación nos dimos un tiempo para intercambiar dos libros, yo le obsequié “Derechos Humanos, una óptica editorial” en el que participo junto con mis compañeros de la Asociación de Editorialistas de Chihuahua y ella me regaló su más reciente obra llamada “Somoza”, la novela del hombre que robó los sueños de una nación y que planeamos venga a presentarlo a Chihuahua a inicios del próximo año, será un honor.

En “Somoza” la tinta de Ligia nos narra cómo una pequeña, de apenas once años de edad, enfrenta el desconcierto de tiempos estremecedores en aquella Managua de 1980 en donde todo se destruía a su alrededor. Capítulos que entretejen la valía literaria y la valentía de su autora nos asoman a la conspiración que se organizó en contra del dictador Anastacio Somoza Debayle, asi mismo nos narra su terrible vivencia de aquel sábado 23 de diciembre de 1972 en la que un fuerte terremoto destruyó prácticamente el corazón de la capital nicaragüense.

Capítulos con nombres tan motivantes de leer como “El taller del carpintero”, “Debutan las balsas”, “Adivinanza”, “Día del trabajo”, “Rayuela” e “Infiltrados”, entre muchos otros, le dan vida a una gran obra en la que Ligia reconstruye a manera de testimonio el escenario de las vivencias de una niña exiliada por la guerra a través de valientes letras que nos proyectan los últimos años de la dictadura del Ingeniero Somoza hasta la emboscada que le hicieron en Asunción Paraguay en septiembre de 1980. Les recomiendo ampliamente este extraordinario libro, a su autora mi aprecio y respeto, claro que sí.

Punto y aparte.

Hace unos días la maestra Norma Gutiérrez, quien por muchos años escribió en este rotativo su columna “Cuestión de actitud”, presentó su quinto libro titulado “Remembranzas I”; El marco de la presentación fue la llegada a los 80 años de vida, motivo por el cual, desde este espacio, va una doble felicitación acompañada de mi aprecio. Ande pues.


Maestro en Finanzas y en Administración de Recursos Humanos. Presidente de la Asociación de Editorialistas de Chihuahua

aruedam@hotmail.com